XXXVII COPA DE S.M. LA REINA
11/04/2016 - 16:01
La cuenta atrás para la gran fiesta del balonmano femenino español alcanza sus últimos días. El próximo viernes, sábado y domingo, la fase final de la Copa de S.M. la Reina regresa a Porriño tres años después de la primera ocasión en la que acogió la resolución del torneo copero. Ahora, el municipio gallego vuelve a tenerlo todo a punto para que equipos y seguidores disfruten como nunca de la que es la fiesta con mayúsculas del balonmano femenino español.
Tras el cambio en el sistema de competición el pasado curso, con el que entraban en la competición equipos de la División de Honor Plata, los 14 equipos de la Liga Loterías de Balonmano Femenino y 6 equipos de la segunda categoría conformaban el cuadro inicial de participantes en la nueva edición del torneo del K.O.
De entre todos ellos, Rocasa, como vigente campeón, tenía asegurado su billete para disputar la fase final, billete que también se ganaría después Porriño, al hacerse oficial que acogería la competición. Bera Bera, Helvetia Alcobendas, Prosetecnisa Zuazo y Mecalia Atlético Guardés cumplieron los pronósticos en la tercera ronda de la competición y consiguieron el billete a Porriño.
Dos duelos de esa tercera ronda nos tendrían, sin embargo, reservadas sorpresas. El Clínicas Rincón Málaga dejaba en la cuneta al Aula Valladolid, que se quedaba sin repetir presencia en la fase final tras su clasificación del pasado curso. Por su parte, el Logroño Sporting La Rioja hacía historia y se convertía en el primer equipo de la División de Honor Plata Femenina en conseguir el pase a la fase final copera, a costa de un equipo de la máxima categoría como es Elche Mustang.
La nueva edición de la fase final de la Copa S.M. la Reina pasará a la historia por ser, además, la primera en la que, de manera paralela, se celebra la MINICOPA que reunirá en la localidad gallega a los ocho equipos cadetes de los clubes participantes. 8 equipos de futuras estrellas que, además de competir, podrán vivir desde dentro la competición de élite y tener muy cerca los espejos en los que se miran. Sin duda, un gran acierto.
