La clasificación de la selección española para la final del Europeo de Macedonia '08, supone un hito histórico para el balonmano español, que ya había sorprendido habiéndose colado en semifinales.
Un equipo descarado, sin complejos y con la confianza que da divertirse en el juego, ha apabullado a una Alemania que llegaba a la antesala del oro invicta.
En los primeros compases, Dueñas dispuso un esquema de juego, tras el minucioso estudio del equipo teutón, en el que la defensa sobre la primera línea era básica, ya que Krause y Jurack eran la gran amenaza.
Hasta el ecuador de la primera mitad, el choque resultó igualado, pero un cinco minutos de oscuridad en defensa y un carrusel de lanzamientos al palo en ataque (hasta 9 en el partido), parecían romper el encuentro en un parcial de 0:4 que lanzaba a las alemanas 4:9 en el 18'.
Una gran Bea, respaldada por Mangué, que está completando un Europeo de ensueño, recortaban las distancias, hasta que Macarena igualaba a 12, con 14 segundos para el descanso. Un descuido fue aprovechado por Krause para irse al vestuario con un gol de renta (12:13).
España había merecido mucho más en los primeros treinta minutos, y con el aliento de un Dueñas convencido en la victoria, las jugadoras saltaron a la pista con hambre de victoria.
Tati Garmendia tomó las riendas en la dirección del juego, mientras que Mangué y Bea se ocupaban de marcar las diferencias desde el exterior, lo que sumado a una Ciobanu excelsa, deshacían a las germanas, alcanzado una renta de 4 goles (24:209 a falta de 11 minutos para el final.
Con ataques más largos y con el aplomo de jugar con el tanteador y con el tiempo, España pasó apuros ante las avalanchas de una Alemania que veía como esfumaba el sueño de alcanzar la final.
Dos parciales de 0:2, colocaban un inquietante 29:27 con inferioridad, pero de nuevo tuvo que se Tati la que con el coraje de quien ansía ganar en cada partido, rubricaba el 30:27 a falta de 2 minutos.
Carmen Martín mantenía las distancias (31:28) tras el gol de Loerper, y tras el último gol teutón de Jurack con 31:29, de nuevo Ciobanu sacó una mano que certificaba el pase a la final, ante la alegría desbordada de un banquillo prisionero de la tensión.
El 32:29 final hizo justicia en un encuentro en el que España se ha reivindicado como potencia mundial del balonmano femenino.
Un sueño hecho realidad, que mañana tocará a su fin a partir de las 16:30 h., cuando España escuche sobre la pista del pabellón Boris Trajkovski de Skopje el himno nacional, en los preliminares de la gran final.
Ficha técnica
España. 32 (12): Ciobanu; Garmendia (8, 4p), Martín (3), Barno, Bea Fernández (6), Cuadrado (1), Mangué (6, 1p), Aguilar (3), Chávez, Pinedo (2), Begoña Fernández (2), oncina (1) y Koleva.
Alemania. 29 (13): Woltering, Englert (p.s.); Jurack (9, 1p), Walzik (1), Woerz (3), Mueller (2), Steinbach, Loerper (3, 1p), Hering (1), Krause (6), Neukamp (2), Melbeck (1) y Althaus (1).
Parciales: 1:1, 2:3, 4:6, 6:9, 9:11, 12:13 (descanso). 14:14, 17:16, 21:19, 24:21, 28:24, 32:29
Árbitros: K. Andersen y P. Sodhal (NOR). Excluyeron por dos minutos a las españolas Mangué, Chávez (dos veces) y Begoña Fernández, y a la alemana Althaus.
Incidencias: Primera semifinal del Europeo femenino de Macedonia disputado en el pabellón Boris Trajkovski, de Skopje, ante 1.000 espectadores.
http://www.ehf-euro.com/mkd2008/schedule-results/final-tournament/final-round.html
