Más de setenta jugadoras de los cuatro equipos del Club Balonmano Palencia fueron recibidas ayer en el Ayuntamiento por el alcalde, Heliodoro Gallego, y otros dirigentes municipales y de la Diputación Provincial tras lograr el ascenso a la Primera División. El homenaje, en el que participó la Federación de Castilla y León, también sirvió para felicitar a todas las secciones que componen esta entidad deportiva por su magnífica temporada, la mejor de toda su historia, en sus once años de andadura.
La primera plantilla senior del Carne de Cervera-BM Palencia consiguió el pasado domingo un histórico ascenso a la Primera División Nacional, tras superar en la liguilla celebrada en el Pabellón Sur de Palencia a las escuadras de Chapela, Dosa y Lagunak.
Pero si el primer equipo recibió el reconocimiento oficial, el homenaje también fue para las secciones inferiores. El Óptica Ramos juvenil se ha proclamado campeón de Castilla y León y participó en la fase previa del Nacional, mientras que el equipo cadete del Víctor Moda obtuvo el subcampeonato autonómico y tomó parte en la fase previa del Campeonato de España. Por último, el conjunto infantil del Rotupal fue segundo en el Campeonato Regional y participará en la fase previa del Campeonato de España.
Labor con la cantera
El regidor municipal, Heliodoro Gallego, aseguró ayer que Palencia se muestra orgullosa de «la gran familia del balonmano femenino», mientras que el vicepresidente de la Federación de Balonmano de Castilla y León, Casimiro Mesonero, expresó que la federación regional se siente muy satisfecha de los logros del Club Balonmano Palencia Femenino y de su importante labor con la cantera. Por último, el presidente del Balonmano Palencia, Rafael González, subrayó que la directiva está dispuesta a seguir trabajando trabajar lo que sea necesario por el futuro del club.
A continuación, las capitanas de los cuatro equipos recibieron una reproducción del Cristo del Otero, mientras que al presidente, Rafael González, se le entregó una reproducción en cerámica de la Puerta del Obispo de la catedral. El acto concluyó con la firma en el Libro de Oro de la Ciudad.