El Barça no pudo cobrarse su venganza en la final de la Super Globe 2022. El conjunto azulgrana, que protagonizó una espectacular remontada en el segundo tiempo, volvió a caer derrotado ante SC Magdeburg, al igual que en 2021. En esta ocasión, en la prórroga (41:39, 21:17 en el descanso, 35:35 al final del segundo tiempo).
El equipo azulgrana murió en la orilla, castigado por sus fallos en momentos decisivos y por el apabullante acierto de Igni Magnusson (12 goles, 71% de efectividad). Los de Carlos Ortega, que habían demostrado un gran nivel en la semifinal ante Lomza Industria Kielce, se encontraron con un serio Magdeburg, que pronto endosó un 3:0 para ponerse por delante (6:3).
A partir de ahí, el equipo culé fue siempre a remolque de los alemanes, más acertados en el lanzamiento. El punto de inflexión llegó en el minuto 37, cuando los de Bennet Wiegert lograron la máxima ventaja (25:19). Remó y remó el Barça, sostenido por un espectacular Emil Nielsen bajo palos, que frenó a sus rivales en los momentos adecuados. Mientras, Aleix Gómez, absolutamente desatado (10 goles de 13 lanzamientos), estrechaba la ventaja hasta empatar.
Fue Hampus Vanne el que pasó de héroe a villano. El extremo sueco puso la igualada sobre la bocina para forzar la prórroga desde los siete metros (35:35), pero, cuando en los estertores de la misma tuvo en sus manos volver a poner la igualada (40:39), Nikola Portner detuvo su lanzamiento. Los culés se desfondaron para defender la última posesión alemana, pero Magnusson no falló y puso la sentencia (41:39).
Fotografía: Saudi Arabian Handball Federation