El equipo nacional promesas femenino ha cerrado hoy la doble confrontación con Portugal con una derrota (24:25, 14:9 al descanso), en un encuentro que tuvo dos partes muy diferenciadas marcadas por el apagón de luz y juego que provocó el desenlace final.
España salió más asentada que ayer al Municipal “Ciudad de Algeciras”. Con un 5:1 muy presionante en defensa, las pupilas de Patricia Sosa evidenciaron haber aprendido los errores que ayer les impidieron romper el choque.
Con un ataque fluido y firmes atrás, el equipo español se marchaba al descanso con un rotundo 14:9 brindando excelentes sensaciones a los aficionados que nuevamente llenaban el pabellón.
En la reanudación España infringió un parcial de 3:1 en los primeros cuatro minutos, despegándose por 7 goles (17:10), manteniendo la superioridad sobre un cuadro luso que se veía sobrepasado en el juego, pese a realizar sólo dos rotaciones.
Pero con el marcador 20:15 se llegó al minuto 40’47” y un apagón de luz en la instalación mandó a los dos equipos al banquillo. Los 20 minutos de espera enfriaron al conjunto español, mientras que las portuguesas tomaban aire intentando recomponer el desaguisado.
Y el apagón cortocircuitó a las de Patricia, que recibieron en 11 minutos un parcial de 2:7, estableciéndose las tablas por primera vez desde el pitido inicial (22:22 en el 52’).
Con igualdad en el luminoso, las lusas anotaron el gol del triunfo a falta de 8” (24:25), tiempo que no fue suficiente para firmar el empate.
“El empate pudiera haber sido el resultado más justo”, afirma la seleccionadora, “ya que no quisimos apretar demasiado en defensa para no provocar faltas y ellas anotaron cuando restaban 8 segundos, y ya no pudimos empatar”.
“Lo cierto es que hoy hemos jugado 40 minutos muy buenos, pero el apagón nos ha bloqueado, quizás porque veíamos el partido ganado, y sin embargo a ellas les ha servido para coger resuello, ya que se basan sobre todo en dos jugadoras que tiran del equipo y no hacen prácticamente rotaciones”, prosigue Patricia. “Ahora tendremos que ver el vídeo y analizar que ha pasado en los últimos veinte minutos”.
En todo caso, al margen del resultado, la seleccionadora se mostraba “muy satisfecha del trabajo durante toda la semana. Ahora toca entrenar, y entrenar todas juntas, seguir en nuestro trabajo de formación de jugadoras y seguir en la línea diseñada. Soy muy optimista del grupo de jugadoras, pero debemos tener más tiempo para trabajar juntos, lo que nos hará tirar para arriba. La próxima concentración de Semana Santa, en la que sólo vamos a entrenar, nos va a venir muy bien. Posteriormente el torneo de Francia será el test para evaluar”.