TORNEO PREOLÍMPICO - Alicante 2012
07/04/2012 - 21:23
España está a sesenta minutos de sellar su pasaporte para los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Le basta con ganar a Argelia dentro de unos minutos, después del empate in extremis (25-25) que acaban de firmar Polonia y Serbia. Ambos equipos plasmaron sobre la pista del Centro de Tecnificación de Alicante la realidad que refleja la clasificación del grupo. Mientras los de Wenta buscaban la rúbrica definitiva de su pasaporte para los Juegos, el conjunto de Vukovic peleaba por llegar a la jornada de mañana con opciones. Esta mezcla de sensaciones se tradujo en un choque pleno de intensidad y responsabilidad por ambos bandos, del que salió victoriosa la selección española, que está ahora a un paso de la Olimpiada.
Como si de un calco del choque ante España se tratase, el equipo serbio salió a la pista cargado de fuerza, con Nikcevic de nuevo como brazo ejecutor con los dos primeros tantos ante Polonia, un poco atenazada en los compases iniciales del choque. Ambas selecciones, conscientes de lo que había en juego, vivieron unos primeros minutos cargados de tensión, en los que el mejor parado fue el conjunto de Vukovic.
Polonia aguantó el empuje inicial de Serbia y nunca perdió la compostura a pesar de verse con tres tantos de desventaja en el minuto 6 (4-1). Desde ese instante, la maquinaria polaca comenzó a engranar sus piezas y en nueve minutos ya había recuperado el terreno perdido (6-6, minuto 15). El duelo entró en una fase de tanteo, de intercambio de golpes, que tuvo su punto culminante al paso por el minuto 22, cuando el cuadro de Bogdan Wenta consiguió ensanchar la diferencia en dos goles (9-11).
Serbia tenía un déficit en la portería y Vukovic dio entrada a Marjanac para intentar recuperar las sensaciones bajo el arco. La salida a pista del portero serbio coincidió con la reacción del equipo balcánico, que aprovechó la aparición de Ilic y un par de acertadas intervenciones de su guardameta para minimizar la superioridad polaca y aterrizar en el descanso con un solo gol de desventaja (14-15), lo que abría el duelo de par en par de cara al segundo acto.
En la reanudación el partido continúo estancado en la presión que destilaba el juego de ambas escuadras. Polonia tuvo varias opciones de descoser el marcador más allá del exiguo tanto de ventaja que fue administrando durante toda la segunda parte, pero Serbia se aferró a sus opciones olímpicas y nunca tiró la toalla. La batalla se fracturó en el minuto 21 cuando los colegiados excluyeron a Beljanski. El equipo de Wenta no desperdició la ocasión y, esta vez sí, sacó partido de su ventaja numérica, si bien se olvidó de cerrar el duelo y lo terminó pagando con un empate que le deja en una situación más que comprometida para estar en Londres 2012. Con todo a favor, Polonia tiró la victoria en el epílogo. Dos exclusiones de Tkacyk, en los minutos 25 y 29, despertaron a Serbia, que igualó a cinco segundos de final gracias a un contragolpe culminado por Nikcevic. Este empate, sitúa a España más cerca del objetivo y aboca a serbios y polacos a una última jornada de infarto.
Como si de un calco del choque ante España se tratase, el equipo serbio salió a la pista cargado de fuerza, con Nikcevic de nuevo como brazo ejecutor con los dos primeros tantos ante Polonia, un poco atenazada en los compases iniciales del choque. Ambas selecciones, conscientes de lo que había en juego, vivieron unos primeros minutos cargados de tensión, en los que el mejor parado fue el conjunto de Vukovic.
Polonia aguantó el empuje inicial de Serbia y nunca perdió la compostura a pesar de verse con tres tantos de desventaja en el minuto 6 (4-1). Desde ese instante, la maquinaria polaca comenzó a engranar sus piezas y en nueve minutos ya había recuperado el terreno perdido (6-6, minuto 15). El duelo entró en una fase de tanteo, de intercambio de golpes, que tuvo su punto culminante al paso por el minuto 22, cuando el cuadro de Bogdan Wenta consiguió ensanchar la diferencia en dos goles (9-11).
Serbia tenía un déficit en la portería y Vukovic dio entrada a Marjanac para intentar recuperar las sensaciones bajo el arco. La salida a pista del portero serbio coincidió con la reacción del equipo balcánico, que aprovechó la aparición de Ilic y un par de acertadas intervenciones de su guardameta para minimizar la superioridad polaca y aterrizar en el descanso con un solo gol de desventaja (14-15), lo que abría el duelo de par en par de cara al segundo acto.
En la reanudación el partido continúo estancado en la presión que destilaba el juego de ambas escuadras. Polonia tuvo varias opciones de descoser el marcador más allá del exiguo tanto de ventaja que fue administrando durante toda la segunda parte, pero Serbia se aferró a sus opciones olímpicas y nunca tiró la toalla. La batalla se fracturó en el minuto 21 cuando los colegiados excluyeron a Beljanski. El equipo de Wenta no desperdició la ocasión y, esta vez sí, sacó partido de su ventaja numérica, si bien se olvidó de cerrar el duelo y lo terminó pagando con un empate que le deja en una situación más que comprometida para estar en Londres 2012. Con todo a favor, Polonia tiró la victoria en el epílogo. Dos exclusiones de Tkacyk, en los minutos 25 y 29, despertaron a Serbia, que igualó a cinco segundos de final gracias a un contragolpe culminado por Nikcevic. Este empate, sitúa a España más cerca del objetivo y aboca a serbios y polacos a una última jornada de infarto.