De promesas a campeones: el viaje glorioso de los Hispanos del 2004-2005

Campeones de Europa en 2022 y 2024, y del mundo en 2023, la generación de oro ha escrito una de las páginas más brillantes del balonmano español

La generación española de balonmano nacida entre 2004 y 2005 ha protagonizado uno de los ciclos más exitosos del deporte base nacional en los últimos años. En apenas tres temporadas, primero como Hispanos Juveniles y después como Hispanos Júnior, este grupo firmó un palmarés difícil de igualar: campeones de Europa Juvenil en 2022 (Montenegro), campeones del Mundo Juvenil en 2023 (Croacia) y campeones de Europa Júnior en 2024 (Eslovenia). Tres títulos internacionales consecutivos que situaron a España entre las principales potencias del balonmano formativo y consolidaron a esta generación como una de las más brillantes de la historia reciente.

A lo largo de este periodo, el equipo dirigido por Javier Fernández no solo destacó por su capacidad competitiva, sino también por un estilo de juego reconocible, una identidad colectiva muy marcada y una notable proyección individual de varios de sus integrantes, muchos de los cuales ya están jugando en División de Honor Masculina, en la élite de las ligas extranjeras o en competiciones europeas. Es por eso que esta generación deja un legado deportivo y formativo que trasciende una clasificación puntual.

EL NACIMIENTO DE UNA GENERACIÓN ESPECIAL
El camino de esta generación comenzó a trazarse en categorías cadetes, cuando el técnico de los Hispanos Promesas en 2019, Daniel Sánchez-Nieves, comenzó a detectar un núcleo de jugadores con un perfil técnico, físico y mental portentoso. En torno a 2018, muchos de ellos ya despuntaban en campeonatos autonómicos y torneos de base con sus respectivos clubes. Es por eso que el seleccionador vio algo especial en ellos, tanto que ha sido «un grupo que siempre ha tenido muy buen feeling entre ellos, la verdad que muy cohesionado, muy conscientes de las posibilidades que tenían», explicaba Sánchez-Nieves.

En esta etapa formativa, el conjunto jugó dos torneos no oficiales: el primero, el de Alcalá de Henares, donde la ciudad acogió el Torneo 4 Naciones y quedaron en tercera posición; y el torneo internacional de Eslovaquia, donde quedaron en segunda posición, con dos victorias y una derrota ante Francia, la que sería la selección contra la que más veces han jugado los españoles, con 10 victorias y 3 derrotas.

La primera concentración oficial como selección juvenil se produjo en noviembre de 2021, con vistas a preparar el ciclo internacional 2021–2022. Fue entonces cuando se empezó a forjar el espíritu de grupo que definiría al equipo en los años siguientes. Dirigidos por Javier Fernández y su equipo técnico, apostaron por una identidad basada en el balonmano moderno que, como dice Fernández, «me gusta ir a muchas posesiones, me gusta que haya esa alternancia también a nivel defensivo, me gusta un balón humano rápido, me gusta que realmente volvamos a ser capaces de agitar un poco el avispero

Con este estilo, jugadores como el central Ferran Castillo, el lateral Djordje Cikusa o el pivote –y capitán del conjunto– Víctor Romero se convirtieron en piezas clave desde las primeras convocatorias, aunque el verdadero punto fuerte del grupo fue siempre su cohesión y compromiso. Esa ambición, unida a una planificación técnica muy cuidada, permitió a esta generación llegar con una base sólida a las grandes citas internacionales. El equipo no solo crecía sobre la pista, sino también fuera de ella, con un grupo humano unido, acostumbrado al esfuerzo y con un fuerte sentimiento de pertenencia, puesto que «se tenía que notar que éramos un equipo hasta cuando estábamos comiendo, cuando se duchaban, cuando pasábamos por las restauraciones… entonces es un poco la idea, el ser siempre un equipo», aseguraba Fernández.

Los Hispanos Promesas en el Torneo 4 Naciones de Alcalá de Henares

PRIMER GRAN ÉXITO: ORO EN EL EUROPEO JUVENIL MONTENEGRO 2022
El Campeonato de Europa Juvenil de 2022, disputado en Montenegro, fue el primer gran punto de inflexión en la trayectoria internacional de esta generación. España llegaba al torneo con buenas sensaciones tras varios amistosos de preparación, entre ellos el Scandibérico de Noruega y los amistosos con Francia y Serbia; la derrota ante este último fue la primera y única en los siguientes dos años de competición.

Se presentaron al Campeonato de Europa sin el cartel de gran favorita, que recaía en selecciones como Francia, Alemania o Suecia. Sin embargo, desde el primer partido, los de Javier Fernández demostraron una solidez y una madurez impropias de un equipo debutante en una gran cita.

La fase de grupos fue impecable: victorias claras ante Francia, Islas Feroe, Suecia y Noruega, con una defensa imponente y un ataque coral. Ya en la Main Round, España superó a Noruega y Dinamarca, asegurándose el pase a semifinales.

El partido decisivo por el oro llegó el 14 de agosto, en Podgorica, frente a una de las favoritas: Suecia. En una final de alto nivel táctico, España se impuso por 34-32 en un encuentro marcado por la gran actuación del portero Álvaro Pérez y los 7 goles del primera línea Petar Cikusa, elegido como MVP del partido. El central Ferran Castillo, clave en la dirección y el control del ritmo, fue otro de los nombres propios del torneo.

La victoria supuso el primer título continental en categoría juvenil para España desde 1994. Más allá del trofeo, el éxito en Montenegro fue la confirmación de que, en esta generación «teníamos un poco esa garra y habíamos conseguido ese oro en Montenegro, pues quizá nos veían todos como una generación con mucho potencial y que todo estaba un poco por construir», según el seleccionador Fernández.

SWE ESP Campeonato de Europa 2022 3
Celebración con la afición de los Hispanos Juveniles tras ganar a Suecia en la final del Campeonato de Europa 2022

LA CONSOLIDACIÓN: CAMPEONES DEL MUNDO JUVENIL CROACIA 2023
Un año después del oro continental en Montenegro, los Hispanos Juveniles llegaban al Campeonato del Mundo 2023 de Croacia con una etiqueta completamente distinta. Según Fernández, «todo el mundo nos vio como que realmente éramos favoritos para el siguiente campeonato, porque la generación teníamos un poco de todos los perfiles.» Lejos de ser una presión, el grupo la asumió como parte natural de su progresión. El torneo representaba una oportunidad para confirmar que el Europeo no fue una excepción, sino el inicio de una era.

España completó un campeonato prácticamente impecable. Superó con autoridad la fase de grupos, en la que se impuso a Brasil, Baréin y Corea, y fue ganando solidez a medida que avanzaba el torneo. En la segunda fase, una contundente victoria ante Egipto y República Checa marcó la pauta de lo que sería el tramo decisivo. Ya en cuartos, el equipo se midió a uno de los grandes rivales de esta generación: Alemania. El encuentro fue una demostración de temple y oficio, con victoria por 32-28 tras un partido de dominio español, sobre todo por el candado en la portería echado por el portero –y MVP del encuentro– Álvaro Pérez.

La semifinal contra Croacia, otro de los colosos europeos, fue una batalla táctica y física con un resultado de 29-37, con actuaciones memorables del pivote Víctor Romero en ataque y del extremo Xavier González, clave en los lanzamientos de 7 metros, firmando 11 tantos en el encuentro. El esfuerzo colectivo en defensa y la capacidad para leer cada momento del partido confirmaban una madurez que iba mucho más allá de la categoría juvenil.

La final, disputada en Opatija, enfrentó a España con Dinamarca. Los Hispanos Juveniles impusieron su ritmo desde el principio, dominando el encuentro con solvencia y levantando el trofeo tras un claro 28-23. El título mundial suponía la primera corona planetaria para España en esta categoría y reforzaba la idea de que esta generación no solo tenía talento, sino que había crecido en personalidad, experiencia y ambición.

La rivalidad con Francia, Alemania y Dinamarca se consolidó como una constante en el camino de estos jugadores, que ya entonces comenzaban a aparecer en rotaciones de sus clubes en División de Honor Masculina o incluso debutaban en competiciones europeas, puesto que, por edad y calidad, ya podían entrar en la liga. El Mundial Juvenil 2023 no fue solo una reafirmación del talento detectado años atrás; fue el momento en que esa promesa se convirtió en realidad.

Spain vs Denmark
Celebración de los Hispanos Juveniles tras ganar a Dinamarca en el Campeonato del Mundo Croacia 2023

LA CONFIRMACIÓN: ORO EN EL EUROPEO JÚNIOR ESLOVENIA 2024
La conquista del Campeonato de Europa Júnior en 2024, disputado en Eslovenia, supuso la validación definitiva del potencial de esta generación. El paso de la categoría juvenil a la júnior suele marcar un filtro natural en muchas selecciones, donde la exigencia física y táctica aumenta notablemente. Sin embargo, los Hispanos del 2004-2005 superaron esa transición con la misma solidez que habían mostrado en etapas anteriores.

En el campeonato, España volvió a imponerse a rivales tradicionales como Francia, Suiza e Islas Feroe, y accedió a la Main Round donde se vio las caras ante Austria, Islandia y Portugal; contra este último cayó por la mínima con un resultado de 37-38. Esta derrota fue un duro golpe a la selección porque, aunque pasaran a semifinales, supuso la primera derrota tras dos años de no perder: 43 han sido los partidos en los que no han fallado. Esta racha se debe a «cómo se han comportado, el hambre que han tenido: ya sea un torneo amistoso o en torneos oficiales», resalta Fernández tras recordar que «nos ganó Portugal, nos deja un poco contra las cuerdas, pero nos conseguimos meter en semifinales».

En la final, los Hispanos Júnior se volvieron a ver las caras con Portugal puesto que «tuvimos la final para poder «vengarnos» entre comillas de ese resultado que nos ganaba Portugal», defiende Fernández. El resultado fue de 35-31, gracias, en parte, a la impoluta actuación de Ferran Castillo que volvió a ser clave con 11 goles a las espaldas, al igual que la impecable actuación del especialista defensivo Óscar Grau.

Más allá del oro, este Europeo confirmó que el grupo no solo mantenía su nivel competitivo, sino que había alcanzado una madurez y una regularidad que rara vez se da en categorías de formación. La constancia y consistencia es la palabra que define esta etapa: Tres grandes torneos, tres oros, tres años seguidos en la cima del balonmano formativo europeo y mundial.

KDP17484
Convertidos en Hispanos Júnior, los jóvenes españoles conquistaron en el verano de 2024 el Campeonato de Europa de la categoría.

EL REVÉS EN POLONIA: NOVENOS EN EL MUNDIAL JÚNIOR POLONIA 2025
El Campeonato del Mundo Júnior 2025, disputado en Polonia, supuso el primer tropiezo en el camino de esta generación: España terminó en novena posición. A pesar de un buen inicio ante Bahréin y Arabia Saudí, una inesperada derrota ante Egipto en la fase preliminar complicó el posicionamiento en la clasificación de la Main Round, dejando al equipo con dificultades para clasificarse. En la siguiente fase, al conjunto de Fernández se le complicaron las cosas; un empate ante Alemania obligó al equipo a contrarrestar la renta del goal average de Alemania para, si ellos perdían, pasar como segundos de grupo. Pero, aunque los Hispanos Júnior hicieran sus deberes, los alemanes rindieron y se llevaron la victoria.

Saudi Arabia vs Spain
El equipo cayó en la Main Round por una derrota contra Egipto y un empate ante Alemania

EL LEGADO Y EL FUTURO
Muchos de los integrantes de esta generación ya han dado el salto definitivo al balonmano profesional. Alejandro Pisonero dirige el juego del Recoletas Atlético Valladolid en División de Honor Masculina, Víctor Romero se ha consolidado como uno de los pilares en el Fraikin BM Granollers en estos años, aunque en la temporada 2025/26 defenderá los colores del Sporting de Lisboa. Y Óscar Grau alterna partidos en el primer equipo del Barça con el segundo equipo del club, aunque en la siguiente temporada, tras la baja de Thiagus Petrus, Grau cogerá las riendas del sistema defensivo. Otros han comenzado a explorar experiencias internacionales en ligas europeas de nivel, como Alemania, donde Ian Barrufet ha quedado tercero en la Bundesliga y en la misma posición en la EHF European League. También encontramos jugadores en la liga francesa, donde Djordje Cikusa ha demostrado su valor como jugador en el Montpellier HB. No obstante, estos dos últimos jugadores volverán al Barça para imponer su juego en División de Honor Masculina.

De cara al futuro, varios de ellos apuntan con claridad a formar parte de los Hispanos, aunque cinco de los convocados en la última convocatoria ya saben lo que es jugar con la absoluta. No será un camino inmediato ni sencillo, pero ya han demostrado tener lo más difícil: el carácter competitivo, la resiliencia ante los desafíos y la convicción de que el balonmano español puede seguir brillando desde abajo hacia arriba.

Spain vs Brazil
Victor Romero en su debut con los Hispanos. Foto Sasa Pahic Szabo – Kolektiff

Más allá de los nombres propios, el impacto de esta generación se nota en la estructura de base del balonmano español. Ha servido como ejemplo para otras categorías, ha reforzado la confianza de los clubes en su cantera y ha elevado el listón competitivo de las selecciones inferiores.

Entrenadores, coordinadores y técnicos coinciden en que esta generación ha cambiado la mentalidad: «Ha sido una experiencia muy positiva, creo que los chicos han entendido perfectamente todo lo que les hemos intentado proponer, y que siempre teníamos una vuelta más, ¡siempre! Cuando el rival parecía que nos tiraba a la lona, conseguíamos levantarnos, siempre manteníamos una actitud como equipo a la hora de solventar los problemas», comentaba Javier Fernández.

La generación 2004-2005 no solo ha destacado por su palmarés en categorías inferiores, sino también por el salto cualitativo que muchos de sus jugadores ya han dado hacia la élite del balonmano profesional. Varios de ellos militan actualmente en División de Honor Masculina y han comenzado su trayectoria en ligas europeas de primer nivel, lo que evidencia la madurez y proyección real del grupo más allá de la etapa formativa. La presencia de algunos en la órbita de la selección absoluta es un síntoma claro del nivel alcanzado por esta generación, puesto que «han hecho historia, nunca nadie lo había hecho, y creo que va a ser muy difícil que alguien pueda conseguir tres oros», subrayó Javier Fernández.

Pero el éxito no puede entenderse sin el trabajo colectivo del cuerpo técnico, una estructura sólida que ha acompañado a estos jugadores en todo su proceso de crecimiento. «Todos son parte fundamental de estos éxitos: Álex Mozas, Jorge Martínez, Carla Abad, los fisios, el médico Ángel Quirós… hemos conseguido una familia», destacó el seleccionador. La cohesión humana, tanto en el vestuario como en el staff, ha sido clave para construir un entorno de alto rendimiento en el que todos aportaron su grano de arena, desde el diseño táctico hasta la preparación física y logística. En palabras del propio Fernández, el equipo técnico no solo ayudó a formar jugadores, sino también personas: «los hemos visto crecer tanto profesionalmente como como personas, y eso ha sido parte fundamental de cada uno de los que están en el staff».

Portugal vs Spain
Javier Fernández ha sido el encargado de dirigir a esta exitosa Generaciñon 2004-2025.

Las despedidas nunca fueron fáciles y los Hispanos Júnior tampoco se salvan, «creo que hemos conseguido una familia, lo podíamos ver en las despedidas que hemos tenido estos últimos días con ellos, incluso con sus padres», comentaba Fernández tras añadir que «hemos vivido tantas cosas bonitas con ellos, pues hemos creado algo muy muy bonito, y donde realmente nos ha dado mucha lástima el despedirnos

Enlaces Relacionados:

Ficha Técnica:

Más Información:

Redes Sociales:

Categorías
Últimas entradas

ENTRADAS RELACIONADAS